¿Qué es polietileno reticulado?

El polietileno reticulado es un tipo de polímero termoplástico que ha sido modificado químicamente para mejorar sus propiedades mecánicas y térmicas. La reticulación del polietileno se logra mediante la introducción de enlaces cruzados entre las cadenas poliméricas, lo que resulta en un material más resistente, duradero y con una mayor resistencia al calor.

El polietileno reticulado se utiliza en una amplia variedad de aplicaciones, como tuberías y sistemas de tuberías para agua potable y calefacción, cables eléctricos y de telecomunicaciones, aislamiento térmico, envases de alimentos, materiales quirúrgicos, entre otros.

Entre las ventajas del polietileno reticulado se encuentran su resistencia a la corrosión, abrasión y productos químicos, su flexibilidad y maleabilidad, su capacidad para resistir altas temperaturas y presiones, su baja absorción de agua y su adaptación a diferentes métodos de fabricación, como el moldeo por inyección y la extrusión. Además, el polietileno reticulado es un material reciclable, lo que lo convierte en una opción más sostenible y respetuosa con el medio ambiente.